sábado, 31 de diciembre de 2016

Movilizacion Morena boicot a gasolineras, manifestación contra alza de combustible y reforma y Movilizacion

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Empieza la cuenta regresiva para el aumento de las gasolinas en México, los esperamos el Domingo 1ro de enero en la gasolinera del metro Romero Rubio a las 12:00.
Empezamos el año defendiendo la economía familiar.



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Manifestación contra alza de combustible y reforma
El primero de enero protestaremos contra el gasolinazo para demandar la renacionalización del petróleo, el patrimonio y la economía nacionales; rescatar la industria petroquímica, mediante un plan emergente de inversión y producción, que fortalezca el mercado interno y el empleo, así como la soberanía energética. Contra la privatización de Pemex y por un aumento general de salarios de 20 por ciento
La cita es a las 12 horas en la Estela de la corrupción, en Reforma esquina con Lieja (Metro Chapultepec).
José Antonio Vital Galicia, Alianza de Trabajadores de la Salud y Empleados Públicos


CONSTITUYENTE CIUDADANA POPULAR

MOVILIZACIÓN Y ARTICULACIÓN PARA IMPEDIR EL ALZA DEL PRECIO DE LAS GASOLINAS Y LOS ENERGETICOS

 A las y los Mexicanos
A la sociedad civil
Al Pueblo de México
A los pueblos y naciones originarias
A las comunidades y organizaciones civiles y sociales

1.- Movilización:
-Entre el 1 y el 7 de enero de 2017 se promueve la campaña de boicot a gasolineras, recolección de firmas, denuncias, mítines, movilizaciones y asambleas.
-Por parte de la Constituyente Ciudadana Popular estamos llamando a asambleas para organizar los bloqueos de gasolineras el 2, 3 y 4 de enero.
-Además de las acciones de resistencia y desobediencia civil pacíficas ya acordadas por diferentes iniciativas y plataformas sociales y ciudadanas para los días 2, 3 y 4 de enero; simultáneamente estamos llamando a realizar asambleas para impulsar y coordinar las primeras movilizaciones nacionales de enero en las plazas públicas o lugares destinados para tal efecto.
-Se impulsa la primera movilización coordinada a nivel nacional el 8 de enero a la 1 pm y una segunda movilización nacional el 13 o 14 de enero, uno o dos días antes de que se aplique el segundo aumento. Las movilizaciones nacionales se realizaran simultáneamente en pueblos, municipios, capitales estatales, con la modalidad que cada quien determine.
-En la ciudad de México, la movilización será el 8 de enero, a la 1 de la tarde, del Ángel de la Independencia al Zócalo. Para la Ciudad de México se llama a una asamblea el 5 de enero, a las 4 de la tarde, en el Monumento a la Revolución.

2.- Articulación:
Para coordinar las principales acciones proponemos impulsar la integración de un espacio de articulación que convoque a todas y todos los que están contra del alza de los precios de los combustibles, por la baja de los precios de la energía y contra la carestía.
-El espacio de articulación será desde las organizaciones civiles, sociales, comunitarias y desde la ciudadanía. Espacio que asume una demanda común y una bandera común, evitando la promoción de banderas partidarias y electorales.
-Este espacio hará suyas todas las manifestaciones de resistencia y desobediencia civil pacífica: boicot de consumidores, bloqueos a gasolineras, edificios públicos, entre otros; además de manifestaciones de todo género.
-Se estructurará desde las comunidades y municipios, a nivel estatal y nacionalmente.
-Independientemente dela primera movilización coordinada a nivel nacional el 8 de enero, lo importante es la celebración de asambleas y reuniones en cada estado.
-La CCP propone que realicemos una asamblea general el 7 u 8 de enero en la Plaza de la República en la Ciudad de México.

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Movimiento de Liberación Nacional - México
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sábado, 24 de diciembre de 2016

¿HASTA CUÁNDO NIN NOVOA COMO CANCILLER DE URUGUAY?


ANTE EL GOLPE DE ESTADO ASESTADO EN EL MERCOSUR POR LOS GOBIERNOS DE LA DERECHA MÁS REACCIONARIA Y PROIMPERIALISTA DE LA REGIÓN Y LA COBARDE AGRESIÓN FÍSICA A LA QUE FUE OBJETO LA COMPAÑERA DELCY RODRÍGUEZ, CANCILLER DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA, POR LAS FUERZAS DE SEGURIDAD ARGENTINA, NOS ADHERIMOS Y APOYAMOS EN TODOS SUS TÉRMINOS EL SIGUIENTE COMUNICADO DIFUNDIDO POR LOS COMPAÑEROS DEL GRUPO DE FRENTEAMPLISTAS DE URUGUAY EN MÉXICO POR LA IZQUIERDA.

COORDINADORA MEXICANA DE SOLIDARIDAD CON VENEZUELA
GRUPO DEL FRENTE PARA LA VICTORIA DE ARGENTINA EN MÉXICO
COMITÉ MEXICANO DE SOLIDARIDAD CON BOLIVIA
RED DE INTELECTUALES , ARTISTAS Y MOVIMIENTOS SOCIALES EN DEFENSA DE LA HUMANIDAD, CAPÌTULO MÉXICO.
MOVIMIENTO DE SOLIDARIDAD NUESTRA AMÉRICA 



Imágenes integradas 1  GRUPO DE FRENTEAMPLISTAS DE URUGUAY EN MÉXICO POR LA IZQUIERDA

¿HASTA CUÁNDO NIN NOVOA COMO CANCILLER DE URUGUAY?

Hemos señalado en anteriores comunicados, que el gobierno uruguayo, a través de su canciller Nin Novoa, viene actuando junto a gobiernos derechistas y espurios de la región, en la campaña de injerencia en los asuntos internos de Venezuela. Esta campaña es encabezada por Luis Almagro desde la OEA, en cumplimiento de los dictados del Comando Sur de los EEUU, en la“Operación Venezuela Freedom 2” -que denunciamos en su momento- y recordamos que en uno de sus párrafos dice: En el plano internacional hay que insistir en la aplicación (a Venezuela)de la Carta Democrática, tal como lo hemos convenido con Luis Almagro Lemes, Secretario General de la OEA”.

Denunciábamos entonces que el gobierno uruguayo, con la postura asumida por el canciller Nin Novoa, aparece formando un bloque con los gobiernos de Brasil, del usurpador y corrupto Temer; de Paraguay, cuyo origen es también un golpe de estado “de nuevo tipo” contra Lugo, con el agravante de que el canciller Eladio Loizaga, participó en el tenebroso Plan Cóndor que coordinaba las acciones del terrorismo de estado de las dictaduras del Cono Sur; y el de Argentina, el derechista y no menos corrupto Macri, para suspender a Venezuela del MERCOSUR. No se necesita ser demasiado perspicaz para comprender que detrás de esta postura, Uruguay se suma una vez más, a la operación imperialista de desbaratar los procesos de unidad e integración regional logrados en los últimos lustros, y en particular, a la operación de desestabilización del gobierno legítimo de Venezuela.

El  argumento por el cual estos países imponen la exclusión de Venezuela es un mero pretexto impregnado de falsedades, ya que ni Paraguay, ni Argentina, ni Brasil, ni Uruguay aun no han cumplido con las normas aludidas, mientras que Venezuela en apenas cuatro años ha cumplido con el 92% de las mismas. A todas luces queda en evidencia que el objetivo principal es excluir a Venezuela, lo que constituye en los hechos, un verdadero “golpe de estado” en el MERCOSUR al estilo de los asestados en Paraguay y Brasil, no casualmente tramado por expertos en la materia.

En un hecho inédito para la diplomacia internacional, el pasado miércoles 14 de diciembre, cuando la canciller venezolana Delcy Rodríguez, legalmente en ejercicio de la Presidencia pro tempore del MERCOSUR, se presentó para participar en la reunión de cancilleres del organismo en Buenos Aires, las fuerzas de seguridad de la Argentina quisieron impedir el ingreso de Delcy a dicha reunión, ejerciendo incluso la violencia física contra la canciller. La agresión a Delcy Rodríguez fue cometida nada menos que a la entrada del Palacio San Martín, la sede histórica del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina.

Para el canciller Nin Novoa, según sus comentarios a la prensa, estuvo bien que la policía de Macri haya intentado impedir la entrada de la presidenta pro tempore del MERCOSUR a una reunión de cancilleres del mismo, acusándola de querer entrar a la fuerza. Es inaudito que la diplomacia uruguaya haya caído tan bajo y sea tan servil. Ni siquiera en los gobiernos de derecha de nuestro país se vio algo semejante.

Para redondear la postura a favor del golpe de estado que se viene perpetrando en el MERCOSUR, Nin Novoa afirmó sin tapujos ante periodistas que lo que se busca es ligar al MERCOSUR a la Alianza del Pacífico, operación ésta de los gobiernos de derecha (Perú, Chile, Colombia y México), en una lógica neoliberal y dirigida a socavar los procesos de integración latinoamericanos y caribeños (ALBA, CELAC, UNASUR, MERCOSUR).

Además, para nadie es un secreto que la Alianza del Pacifico es parte ya del TTP (Tratado Transpacífico de Libre Comercio e Inversiones), y que uno de sus objetivos es torpedear la influencia de China en el comercio de la región. Resulta difícil de comprender las contradicciones en política exterior del gobierno uruguayo, donde por un lado Nin Novoa actúa en el sentido antes señalado, mientras el Presidente Vázquez dialoga con el Presidente Maduro en la búsqueda de una salida a la situación en el MERCOSUR. Como tampoco es comprensible que el canciller Nin Novoa hable de la integración a la Alianza del Pacífico, y por ende al TTP, mientras Vázquez viaja a China, a tratar acuerdos comerciales y de inversión con el gigante asiático.

De lo que no puede quedar duda alguna, es que la conducción de la política exterior del país por Nin Novoa, es a contrapelo de las resoluciones y posturas de los organismos del Frente Amplio y del movimiento social y sindical del país, encabezado por el PIT-CNT, que entre otras manifestaciones, acaba de recibir a la canciller venezolana Delcy Rodríguez para reafirmar la solidaridad incondicional con el pueblo y gobierno de Venezuela, condenar el agravio inferido a la compañera Delcy por la patota de Macri, enfatizando en palabras del dirigente Marcelo Abdala, el “rechazo a la política que en esta materia(Venezuela), viene llevando adelante el canciller de nuestro país, Rodolfo Nin Novoa

En el reciente inaugurado VI Congreso “Rodney Arismendi” del Frente Amplio, se reafirmaron los conceptos históricos del Frente Amplio en su “definición antioligárquica, antiimperialista y antipatriarcal” y se denunció la existencia a nivel continental, de “una ofensiva neoliberal, conservadora y excluyente, que quiere arrasar con las conquistas sociales, retroceder en la conquista de derechos, privatizar el Estado y concentrar los recursos económicos en pocas manos”. Ofensiva neoliberal, conservadora y excluyente, de la cual forma parte el canciller Nin Novoa.

Por eso es que nos preguntamos nuevamente ¿Hasta cuándo continuará como canciller de nuestro país Rodolfo Nin Novoa? ¿De quién recibe instrucciones?

Manifestamos nuestra solidaridad con la compañera canciller del Gobierno Bolivariano de Venezuela, Delcy Rodríguez. Rechazamos las maniobras de la derecha corrupta de los gobiernos de Brasil, Argentina y Paraguay, y reclamamos la inmediata renuncia de Nin Novoa al cargo de Ministro de Relaciones Exteriores del Uruguay. Como ha sido dicho en el reciente acto de solidaridad y desagravio a la compañera Delcy en la sede del PIT-CNT, sumamos nuestra voz en defensa del hermano pueblo venezolano y su Revolución Bolivariana.

 GRUPO DE FRENTEAMPLISTAS DE URUGUAY EN MÉXICO POR LA IZQUIERDA

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viernes, 23 de diciembre de 2016

RECORDAR A LEÓN TROTSKY

RECORDAR A LEÓN TROTSKY 
Andrés Lund Medina (*)


A 76 años del asesinato de Trotsky, deseo recordar su pensamiento y su praxis para dialogar con él y escuchar qué nos dice que nos sea útil, desde una perspectiva revolucionaria, para nuestros tiempos.
Entablar este diálogo con Trotsky supone cuestionar otras voces que dicen que con la caída del mal llamado “socialismo real” también se derrumbó el marxismo y perdió sentido el pensamiento de Trotsky. Es verdad que por fortuna cierto marxismo se derrumbó: el simplificado marxismo ortodoxo, elaborado en la época de la Segunda Internacional y refuncionalizado como ideología de la burocracia estalinista que se propalaba en manuales de Materialismo Histórico (que explicaban las leyes de la Historia) y de Materialismo Dialéctico (que explicaban las leyes de la Materia). Sin embargo, el marxismo de Trotsky siempre fue un marxismo heterodoxo, crítico, creativo, un marxismo para la praxis ética-política.

También hay voces que afirman que el marxismo ha muerto porque con el posmodernismo murió el llamado marxismo occidental o académico. Y en parte es verdad que cierto marxismo teórico, principalmente filosófico, que evadía las cuestiones políticas y el examen crítico de la dinámica del Capital, fue desplazado de las universidades por las sucesivas oleadas de estructuralismo, posestructuralismo y posmodernismo. Además, reforzando la expulsión del marxismo de lss universidades, en los años iniciales de la ofensiva neoliberal se anunció el Fin de las Ideologías, de las Utopías y de la propia Historia porque -decían- el capitalismo había triunfado. Sin embargo, el marxismo de Trotsky y de los trotskistas nunca fue un marxismo académico (aunque produjo grandes obras teóricas) o filosofante, ya que se centró en el estudio del capitalismo, el análisis crítico de las sociedades burocráticas autoproclamadas socialistas y el estudio de coyuntura para la praxis política. No nos extraña que en las universidades no se recuerde el 76 aniversario luctuoso de Trotsky porque nunca lo hicieron. Pero nosotros lo hacemos cuando no es el marxismo el que ha muerto o agoniza sino cuando el capitalismo parece entrar en su fase terminal -en una crisis civilizatoria- que pone en riesgo la supervivencia de la especie humana.

Algunas otras voces sostienen que como ya no existe la URSS y el estalinismo está muerto, el pensamiento de Trotsky y el trotskismo ya no tienen sentido. Pero eso sólo lo pueden decir quienes desconocen la riqueza del marxismo de Trotsky, que va mucho más allá de su larga polémica con el estalinismo. –Polémica que, por cierto, al final Trotsky ganó: los propios sucesores estalinistas de Stalin denigraron su figura una vez que éste murió y los estudiosos han documentado los crímenes de Stalin: solamente en el Gulag, de los 4 millones de prisioneros, las muertes políticas suman 1.4 millones de personas. Ya quedó registrado en la Historia el carácter contra-revolucionario del estalinismo, así como las prácticas autoritarias y carentes de ética de una burocracia que no sólo imponía sin admitir réplica sino que se dedicaba a falsificar, calumniar, secuestrar, deportar a campos de concentración, ejecutar, torturar, mandar asesinar a todos los disidentes… En contraste, la figura de Trotsky crece y se presenta como lo que fue, como un héroe trágico de nuestra época, en novelas como la exitosa El hombre que amaba los perros de Leonardo Padura.

Es verdad que con el derrumbe de la URSS, el estalinismo quedó definitivamente sepultado (aunque en México parecen sobrevivir algunos de sus espectros insepultos). Sin embargo, el pensamiento de Trotsky sobrevive sosteniendo el ideal socialista y vive en la IV Internacional y en muchas otras organizaciones socialistas. De hecho, un posible signo del fin de la larga noche neoliberal es que el término “socialismo”, después de ser ensuciado por el estalinismo, vuelve a ser prestigioso entre la juventud ¡incluso en Estados Unidos!

Desde una perspectiva estratégica revolucionaria, podemos admitir que la organización trotskista resulta insuficiente para reagrupar fuerzas sociales y políticas que combatan al capitalismo, que necesitamos impulsar partidos amplios (no constituidos sobre la identidad trotskista) que, combatiendo consecuentemente al neoliberalismo, pasen a luchar contra el propio capitalismo. Sin embargo, en las organizaciones ligadas a la IV Internacional, e incluso más allá de ellas, la formación en el pensamiento de Trotsky debe ser defendida y reactivada no sólo porque es una herencia y una seña de identidad nuestra sino porque el marxismo de Trotsky es más actual en nuestros días de lo que podría pensarse.

Es verdad que ya no existe la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas (cuatro mentiras en cuatro palabras, decíamos), pero desde hace varias generaciones en las escuelas se enseña que la URSS era socialista y que el socialismo fracasó. Ante tal falsedad, siempre nos es necesario decir que ninguna de las llamadas y autoproclamadas sociedades socialistas lo eran realmente. Ante la mentira oficial de que el socialismo fracasó todavía debemos aclarar: 

Que existió una corriente socialista, la que viene de Trotsky, que criticó y luchó contra la dictadura burocrática y represiva que se instituyó con la traición de la revolución rusa. 

Que para nosotros el socialismo sólo puede ser mundial, democrático y libertario, igualitario, sin enajenación del Capital y del Estado, sin explotación ni opresiones de ningún tipo. 

Que para nosotros no puede existir el socialismo en un solo país, aunque sí revoluciones políticas nacionales en las que la clase trabajadora toma el poder político del Estado abriendo procesos de revolución permanente.    

Que ese ideal socialista no sólo es nuestro horizonte estratégico sino nuestra instancia crítica para evaluar cualquier intento de romper con el capitalismo y empezar a construir el socialismo.

Cabe agregar que si bien es cierto que el estalinismo ya no existe, la burocracia permanece y se fortalece en el capitalismo. En este sistema, una amplia capa parasitaria de sirvientes del Capital (políticos y administradores) tiene la función de vigilar y controlar no sólo los procesos políticos y económicos sino prácticamente todos los procesos de la vida social. Tal es el sentido último, por poner sólo un ejemplo, de la mal llamada Reforma Educativa: despojar a los trabajadores de la educación de sus derechos laborales para imponerles un control burocrático administrativo. Pero la burocracia no sólo es segregada por el capitalismo, también lo siguen haciendo los sindicatos y, por supuesto, los partidos institucionales -incluso los de la llamada izquierda progresista.

Desde esta perspectiva, la crítica al despotismo burocrático refuncionalizado por el capitalismo en su fase de dominación neoliberal sigue siendo vigente.

Aclaro que no quiero recordar a Trotsky para volverlo un oráculo que va a responder a todas nuestras preguntas o que va a resolver todos nuestros problemas como revolucionarios. Sería ir contra Trotsky y contra el propio marxismo que él defendió volver sus escritos y pensamientos Dogmas incuestionables y no revisables, volver sus trazos políticos líneas no modificables.

De hecho, como debería saberse, Trotsky desarrolló un marxismo no dogmático ni ortodoxo. Su herética y renovadora idea fuerza de la Revolución permanente era una concepción heterodoxa de la revolución, que iba en contra de lo establecido por el simplificado marxismo de la Segunda Internacional. Y si seguimos sus debates en torno al curso de la revolución rusa podemos detectar sin problema alguno que Trotsky revisó e incluso modificó radicalmente sus políticas. Y si conocemos sus elaboraciones políticas, podremos apreciar cómo éstas dependían siempre de las circunstancias y situaciones concretas de cada país.
Sin embargo, es verdad que los trazos estratégicos más generales del pensamiento político de Trotsky son sus grandes aportaciones para nuestro presente. Me refiero a la concepción de la Revolución permanente, la propuesta del Programa de Transición y a la necesidad de organizar el partido mundial de la IV Internacional.

Estos elementos son esenciales para definir los contornos del marxismo de Trotsky, que es una herencia que debemos saber recibir y conectar con la tareas revolucionarias de nuestro presente.
En ese sentido, quiero recordar para recuperar el marxismo de Trotsky como un marxismo crítico, innovador, creativo, heterodoxo.

Un ejemplo de ello es la poderosa concepción de la Revolución permanente. 
Ésta no es, por supuesto, una idea que puede brotar pensando en solitario frente al escritorio. Es una concepción que se le impone a Trotsky con el acontecimiento revolucionario de 1905 en Rusia.
El 9 de enero de 1905 los trabajadores de San Petersburgo marchaban en una enorme y pacífica manifestación al Palacio de Invierno del zar, encabezados por el pope Gapón, para suplicarle que atendiera sus quejas. El zar no sólo se negó a escucharlos sino que ordenó a las tropas del palacio que abrieran fuego contra la multitud. Esa masacre provocó un estallido revolucionario: huelgas con demandas económicas que se volvieron manifestaciones políticas, llegando a la formación de soviets o consejos, que en principio fueron formados por los representantes directos de los obreros en huelga. Trotsky llegaba de Alemania a Kiev y de ahí pasó de inmediato a San Petersburgo, desarrollando un excepcional papel de agitación y participando sin reservas en el proceso revolucionario. Con bolcheviques, mencheviques y social-revolucionarios, Trotsky asumió la dirección del soviet de Petrogrado y dirigió la batalla política contra el zarismo, generando un doble poder que luchaba arrancando concesiones sociales y por su supervivencia política.

Deutscher comenta que con la existencia del Soviet, las diferencias organizativas y políticas entre bolcheviques y mencheviques parecían desvanecerse: en condiciones de libertad política, Lenin abogaba por una elecciones de abajo hacia arriba en el partido y Mártov se cuestionaba sobre el papel revolucionario de los liberales.

Cuando el Soviet fue reprimido, Trotsky fue arrestado, encarcelado y deportado a Siberia. En esa época escribió 1905 y Balance y Perspectivas, en donde expone por primera vez su teoría de la Revolución Permanente.

Como se sabe o debiera saberse, Rusia era concebida como una sociedad atrasada y símbolo de la reacción europea. Los socialistas discutían sobre la próxima Revolución en Rusia, pero asumiéndola como burguesa.

Los mencheviques luchaban por una República democrática impulsando reformas constitucionales en alianza con la burguesía liberal. Pléjanov, polemizando con los populistas, ya había planteado la necesidad de pasar por el capitalismo, por lo que era imprescindible aliarse con la burguesía e impulsar contra el zarismo la lucha por una revolución burguesa. Axelrod y los mencheviques sostenían la necesidad de una alianza con la burguesía liberal para combatir el zarismo e impulsar reformas constitucionales que abrieran espacio a una vida pública democrática. Las tareas de la revolución socialista se postergaban en un futuro indeterminado.

Los bolcheviques luchaban por una Dictadura democrática que impulsara una reforma agraria; por eso proponían una alianza entre obreros y campesinos, pero ninguna alianza con la burguesía liberal. Lenin aceptaba la necesidad de desarrollar el capitalismo e impulsar una revolución burguesa. Sin embargo, le negaba a la burguesía liberal rusa la capacidad de hacer una revolución y, sobre todo, de impulsar una reforma agraria que afectara a los terratenientes. Sólo con una alianza entre los campesinos pobres y el proletariado se podría impulsar una revolución que se volvería una dictadura (contra los terratenientes y fracciones de la burguesía) democrática. Pero las tareas socialistas también se postergaban.

Polemizando con estas ideas, Trotsky formula su concepción de la Revolución permanente.
El “etapismo” de ambas concepciones, sobre todo de la menchevique, se correspondían con un “marxismo ortodoxo” típico de la 2ª Internacional, que daba primacía al factor económico en una concepción fatalista y monocausalista.

Trotsky cuestiona desde su 1905 “la concepción de una especie de dependencia automática de la dictadura proletaria, respecto de las fuerzas y los medios técnicos de un país”. A eso lo veía como “un prejuicio de materialismo "económico" simplificado al extremo. Tal criterio nada tiene de común con el marxismo...”

Trotsky no aceptaba ningún papel revolucionario de la burguesía liberal y veía en un gobierno obrero apoyado por los campesinos el impulso de una revolución democrática que iría más allá de las medidas burguesas, realizando tareas socialistas como la colectivización y el control estatal de la economía. Con todo, el impulso socialista sólo podía ser mundial y con la intervención decisiva del proletariado europeo.  
Por cierto, con esa concepción “etapista” los comunistas mexicanos se subordinaron por largas décadas al régimen posrevolucionario que se institucionalizó como PRM que devino luego en PRI-goberno. Para ellos la revolución mexicana era burguesa y debía cumplir sus tareas de desarrollar el capitalismo. En cambio, desde la concepción de la revolución permanente, nosotros, los trotskistas, vimos a la revolución mexicana como interrumpida, por lo que debía construirse un partido obrero independiente del régimen que aliado a los campesinos recomenzara la revolución permanente.

Con la experiencia de la revolución de 1905, a los 26 años Trotsky escribe uno de sus primeros libros notables: Balance y perspectivas. Más allá de sus dotes de escritor y del análisis riguroso y original que desarrolla en este libro, el texto está impregnado de un espíritu revolucionario. Hace un análisis de las (I) “peculiaridades del desarrollo histórico” ruso y del propio desenvolvimiento del capitalismo (II. “Las ciudades y la capital”). Examina las experiencias revolucionarias en su conjunto: revisa la revolución francesa (1789), la europea de 1848 e incluye en esa línea a la revolución rusa de 1905 (III. “1789-1848-1905”).

Estudia la relación entre (IV) “La Revolución y el proletariado”, formulando su idea de la revolución permanente. En este capítulo explica su concepción de la revolución como disputa del poder político:
“La revolución es una prueba de fuerza abierta entre las fuerzas sociales en lucha por el poder.”
Al final de ese capítulo ya apunta hacia la revolución permanente:
“Alguien puede consolarse pensando que, dentro del marco de una revolución burguesa, la dominación política del proletariado será sólo un episodio pasajero; y se puede también echar en olvido el hecho de que el proletariado, una vez en posesión del poder, no lo cederá de nuevo sin una resistencia desesperada, no lo soltará hasta que le sea arrebatado por las armas.”

Las respuestas a las interrogantes que abre sobre la posibilidad de tomar el poder con el partido del proletariado las soluciona en el siguiente capítulo: V. “El proletariado en el poder y el campesinado”, llegando a la formulación de la “dictadura obrera y campesina” como sustento de la revolución permanente. 

En el capítulo siguiente, VI. “El régimen proletario”, traza las tareas democráticas y socialistas de este tipo de régimen, el ejercicio mismo de la revolución ininterrumpida. Ante sus críticos ortodoxos, examina la cuestión de (VII) “las condiciones previas al socialismo”. Concluye, en el siguiente capítulo (VIII. “El gobierno obrero en Rusia y el socialismo”) que las condiciones objetivas para el socialismo han sido creadas por el desarrollo económico de los países capitalistas avanzados, y se pregunta por las condiciones en Rusia.  Aunque explica que es inevitable y posible que tomando el poder político se avance en la transformación socialista de la economía, reconoce que es imprescindible “el apoyo estatal directo del proletariado europeo”. Por eso dedica el siguiente capítulo, el IX, a la relación necesaria entre “Europa y la Revolución”, aclarando la cuestión planteada:

“Abandonada a sus propias fuerzas, la clase obrera rusa sería destrozada inevitablemente por la contrarrevolución en el momento en que el campesinado se apartase de ella. No le quedará otra alternativa que entrelazar el destino de su dominación política, y por tanto el destino de toda la revolución rusa, con el destino de la revolución socialista en Europa.”

El libro termina con un llamado a (X) “La lucha por el poder”.
Trotsky no lo sabía, pero estaba sacando las mismas conclusiones de Marx después de la experiencia de la Revolución de 1848, cuando manda una “Circular del Comité Central a la Liga Comunista” en marzo de 1850. En este documento Marx expresa abiertamente la idea de la “revolución permanente”:
“Las peticiones democráticas no pueden satisfacer nunca al partido del proletariado. Mientras la democrática pequeña burguesía desearía que la revolución terminase tan pronto ha visto sus aspiraciones más o menos satisfechas, nuestro interés y nuestro deber es hacer la revolución permanente, mantenerla en marcha hasta que todas las clases poseedoras y dominantes sean desprovistas de su poder, hasta que la maquinaria gubernamental sea ocupada por el proletariado y la organización de la clase trabajadora de todos los países esté tan adelantada que toda rivalidad y competencia entre ella misma haya cesado y hasta que las más importantes fuerzas de producción estén en las manos del proletariado.”

Por cierto, en relación a la revolución rusa, Marx no apoyó a los “marxistas rusos” como Pléjanov o Vera Zassoulitsch en 1881, que planteaban la necesidad de pasar por el capitalismo sino a los revolucionarios populistas. En sus cartas a Vera Zassoulitsch, Marx incluso explora la posibilidad de acceder al socialismo trascendiendo al capitalismo en Rusia. Todas esas ideas fueron abandonadas tanto por la ortodoxia de la 2ª Internacional como por los marxistas rusos, volviendo dogma una concepción etapista de la revolución.
Sin embargo, Trotsky no cita esos textos de Marx porque no los conocía. Él solo había llegado a esas conclusiones.

¿Cómo llegó Trotsky a una concepción que se separaba del simplismo economicista de la Segunda Internacional?

Michael Lowy recuerda que Trotsky no leyó a Hegel pero se educó leyendo a Antonio Labriola, el marxista italiano que cuestionó las concepciones economicistas y simplistas del marxismo ortodoxo de la época, restaurando los conceptos de Totalidad y proceso dialéctico, rechazando los dogmatismos y el culto a los textos, insistiendo en un desarrollo crítico del marxismo.

Para Trotsky, el marxismo es, ante todo, un método de análisis, pero no de análisis de textos sino de las relaciones sociales. Un análisis social pero desde el punto de vista de la Totalidad, como lo aplica Trotsky en Balance y Perspectivas.

Por eso hay una temprana crítica al  “materialismo ‘económico’ simplificado al extremo” y, en contraste, un análisis complejo y multifactorial: histórico, económico y político, e incluso mundial, del problema de la revolución rusa.

Contra los fatalismos, Trotsky defiende la idea de descubrir posibilidades en el desarrollo histórico, planteando “posibilidades objetivas”. 

Contra las concepciones mecanicistas y simplificadoras, Trotsky defiende la concepción del desarrollo desigual y combinado, es decir: la idea de la discordancia de las diversas esferas sociales así como de sus ritmos y tiempos, y la singularidad de la formación social por su combinación de formas atrasadas con formas avanzadas en el desarrollo económico.

La teoría de la revolución permanente es, para algunos, la aportación más significativa e innovadora de Trotsky al marxismo.

Con ella se abre la posibilidad en los países semi-coloniales o dependientes de trascender al capitalismo e iniciar una transición democrática y socialista, inaugurando una nueva era: la de una revolución permanente que no terminará hasta el establecimiento del socialismo como sistema justo, humanizador, igualitario y democrático a nivel mundial.

Aunque influido por Parvus e inspirado por algún artículo de Mehring, Trotsky desarrolla sus ideas de un modo propio y original, rompiendo teóricamente con la concepción fatalista, monocausalista y economicista del marxismo ortodoxo que elabora la Segunda Internacional (y que re-circuló el estalinismo). Con esta concepción desarrolla un marxismo creativo y crítico, complejo y totalizador, que hace un uso magistral del principio metodológico complejo  del “desarrollo desigual y combinado”.
Con esa teoría, Trotsky predice a la Revolución Rusa de 1917 y le permite a Lenin ir más allá de la revolución burguesa, iniciando con los bolcheviques el primer experimento de transición al socialismo en la historia.

Es una teoría que, además, ha pasado la prueba de la práctica, pues se ha confirmado en todas las tentativas revolucionarias del siglo XX.

Por otro lado, la teoría de la revolución permanente se vuelve una instancia crítica de todo proceso revolucionario (por eso la burocracia estalinista la enfrentó con su absurdo ideológico del “socialismo en un solo país”). La revolución permanente es el deber ser que cuestiona a lo que “realmente” es; es el Ideal socialista y emancipatorio denunciado a lo real que se separa de él.

Por eso, la Revolución Permanente de Trotsky, que se concreta en una revolución contra el orden burgués, tiene su continuidad en su lucha por una revolución cultural que dé un “nuevo curso” anti-burocrático a la revolución rusa, así como en su lucha por una revolución política contra el estalinismo y la “revolución traicionada”,  y, finalmente, en su batalla por fundar una nueva organización mundial, la IV Internacional, cuya tarea es impulsar a la revolución ininterrumpida a nivel mundial.

Esta concepción de la Revolución permanente no sólo fue renovadora o heterodoxa en el marxismo de la época sino que, además, traza las perspectivas revolucionarias del presente para todo el mundo.
Nunca como ahora, que las políticas neoliberales asfixian las libertades democráticas y aniquilan las conquistas sociales -tanto en los países periféricos, semicoloniales o dependientes  como en los países imperialistas- se hace necesaria una revolución permanente que luche por el poder político para satisfacer las demandas democráticas -trascendiendo las limitaciones liberales y burguesas- para resolver las demandas económicas y sociales en una dinámica que necesariamente debe ir más allá del marco capitalista nacional.

Hoy recordamos a Trotsky y su ejemplo y éste nos dice que necesitamos un marxismo crítico, renovador, creativo, heterodoxo, que dialogue con otras tradiciones y discuta con libertad y apertura. Nos dice que nunca más se debe apelar a los dogmas, a las descalificaciones, al culto a los textos. Nos dice que no repitamos los procedimientos estalinistas de censura y ataque personal. Que el marxismo es por esencia crítico y antidogmático y que, por eso, pueden existir muchos marxismos que deben dialogar entre sí.
Pero también quiero recordar para recuperar el marxismo de Trotsky como un marxismo militante, un marxismo comprometido con la praxis revolucionaria.

Es verdad que Trotsky fue un innovador en el marxismo pero nunca fue un teórico, un intelectual (dedicado por entero al pensamuento) o un académico. Él pensó y teorizó siempre para la praxis revolucionaria, para la praxis ética-política que busca transformar al mundo.

Escribe, y escribe muy bien, para hacer política. Escribe cientos de artículos, también escribe panfletos y folletos, incluso volantes (no en vano lo apodaron La Pluma), pero escribe para agitar, para trazar políticas, para lanzar consigas, para polemizar. También escribe brillantes libros para reflexionar y analizar situaciones concretas,  sacando siempre conclusiones políticas (incluso cuando escribe sobre el arte).
Trotsky siempre estuvo comprometido con la praxis. 

Trotsky fue un militante y por eso su marxismo fue un marxismo militante. Por ello es injusto el camarada Enzo Traverso (destacado historiador que fue ayudante de Mandel) cuando critica a Trotsky como intelectual en la revolución. En ¿Qué fue de los intelectuales?, Traverso dibuja a un Trotsky intelectual que se pasea por París y Viena, discutiendo en los cafés y viviendo de su pluma como periodista, pero que cuando accede al poder, como jefe del ejército rojo durante la guerra civil, se vuelve “una especie de filósofo-rey” ya que propone la dictadura del partido, la militarización de los sindicatos, la ejecución de rehenes, etc. Se vuelve, dice, un hombre de poder en el sentido maquiavélico. Sólo recupera su papel de intelectual cuando critica al estalinismo.

Sin embargo, Trotsky no se comportó como un intelectual durante la revolución rusa (pese a sus sobresalientes dotes intelectuales) ni cuando luchó contra la burocracia estalinista. Trotsky actuó como un militante. De hecho, perdió debates importantes y acató lo que el partido resolvía. Todos sabemos que no fue un político maquiavélico en su lucha contra Stalin. De haberlo sido, podría haber utilizado al ejército rojo que comandaba contra Stalin. –“Entonces, Stalin habría sido yo”- contestó alguna vez Trotsky cuando le preguntaron por qué no lo hizo. Traverso lo reconoce cuando dice que Trotsky no eligió el camino de la confrontación por la fuerza con el estalinismo sino la batalla en el plano de  las ideas. Pero eso no lo reduce a un intelectual sino a un militante que lucha por sus ideas en una organización política, agrupado (en la Oposición de Izquierda) y tratando de democratizar la discusión partidaria.  

Ya como profeta desterrado, y pese a las insistencias de muchos de que se dedicara a escribir y a no perder el tiempo con los debates interminables intentando formar la IV Internacional, Trotsky nunca abandonó su compromiso militante: su compromiso de organizar, incluso en las peores condiciones, un partido internacional.

Gracias a él, el trotskismo nunca practicó el marxismo ortodoxo que se volvió ideología de la burocracia estalinista ni se volvió un marxismo académico, desligado de la praxis política. El trotskismo fue, es, debe ser un marxismo militante que piensa y repiensa todo en función de la praxis revolucionaria.

Por último, quiero recordar a Trotaky para recuperarlo como modelo de un marxismo intransigentemente ético.

Daniel Bensaïd presenta a Trotsky como un ejemplo de la apuesta melancólica que todo revolucionario hace. Trotsky apuesta su vida y todas sus facultades por el ideal más grande que puede haber con la conciencia de que no le tocará verlo ni vivirlo.

Sin embargo, la figura del apostador melancólico no alcanza para valorar a Trotsky. De hecho, si se conoce la vida de Trotsky, ésta resulta apasionante y nos impresiona hondamente porque en ella se nos presenta la figura de uno de los pocos verdaderos héroes trágicos de nuestra época.

Un héroe es aquel que se enfrenta sin doblegarse nunca a una fuerza negativa que sabe que lo sobrepasa. Un héroe combate a veces solo, quedándose solo, a una fuerza inmensa con la conciencia de que ésta al final terminará con él. Como muchos otros, puede claudicar pero nunca lo hace, nunca deja de combatir. Por eso, esa fuerza terrible no logra vencerlo porque nunca dejó la lucha y nunca se doblegó.
La triste historia de los comunistas del siglo XX es una historia de doblegados ante el peso del estalinismo. Miles de militantes e intelectuales prefirieron creer en Stalin y no pensar y mucho menos criticar. Por eso el simplificado y dogmático marxismo ortodoxo se difundió con mucho éxito.

Muchos otros sabían lo que significaba el estalinismo y decidieron callar lo que sabían. Algunos de ellos eran intelectuales que prefirieron no abordar temas políticos y la crítica al estalinismo. Mejor se dedicaron a la Estética  y a la reflexión sobre el arte (como el Lukács maduro o el joven Sánchez Vázquez), o a la epistemología (como la escuela de Della Volpe en Italia o la escuela de Althusser en Francia), o a la crítica de la razón instrumental y la sociedad unidimensional (como la Teoría crítica), etc. De esa manera se cultivó lo que Perry Anderson llamó el marxismo occidental, en realidad un marxismo filosofante, académico, universitario y alejado de la política, de la crítica al estalinismo o a la dinámica del Capital.
Otros sabían lo que era el estalinismo y lo defendían como “socialismo real”. Cuando éste se derrumbó, pasaron de inmediato al anti-comunismo o a posiciones socialdemócratas, justamente cuando ésta viraba de lleno hacia el liberalismo político (que lleva en sus entrañas al liberalismo económico: al neoliberalismo).

Hanna Arendt diría que todos esos comunistas sucumbieron, como muchos nazis, a la banalidad del mal porque no ejercieron su conciencia ética crítica. Y era difícil hacerlo porque había un supuesto bloque socialista con mucho poder económico y político. O porque el dogma, la descalificación y la delación eran las formas de un inexistente debate entre comunistas. O porque muchos de ellos vivieron aterrorizados hasta no sólo doblegarse sino quebrarse y perder toda dignidad.

Para su desgracia hubo alguien que fue un intransigente ético que por su sola existencia los condena a todos ellos: León Trotsky.

-“Yo no soy Trotsky”- exclama Bujarin cuando se autodenigra en los procesos de Moscú.
¿Qué significa su expresión en ese contexto?

-“Yo no tengo el valor, la firmeza, la fuerza, la consistencia e intransigencia ética de Trotsky para enfrentar a Stalin y todo lo que representa”.

Esa intransigencia ética de Trotsky es otra herencia que con orgullo debemos defender.
Por todo eso, además, debemos recordar a León Trotsky, leerlo, dialogar con él, aceptar los desafíos estratégicos y revolucionarios que nos heredó.

En realidad, la obra histórica, política, literaria y crítica de Trotski sigue siendo dusfrutable y ejemplar: su libro autobiográfico (Mi Vida) parece novela. Sus dos tomos sobre la Historia de la revolución rusa también parece una novela y son una importante aportación a la explicación y comprensión de dicho acontecimiento histórico. Su crítica inicial a la burocratización del proceso revolucionario apela a cambios significativos desde la vida cotidiana (El Nuevo Curso) y su explicación a La revolución traicionada no se centra en el personaje de Stalin sino en las dificultades del proceso revolucionario ruso. Su análisis sobre el fascismo alemán (Alemania, la revolución y el fascismo) es ejemplar, incluso su biografía sobe Stalin es objetiva y muy interesante, etc. En su muy extensa obra, encontramos una escritura clara y entretenida, objetiva y apasionada, crítica y autocrítica, pero siempre centrada en la cuestión de la Revolución, no como lucha personal sino como cuestión histórica. En ese sentido, en su vida, sus acciones y su obra se preserva el aliento de la utopía revolucionaria.

Por eso, recordar a Trotsky es sorprenderse de que su pensamiento y ejemplo vital sigue vivo. 

(*) Participación de Andrés Lund (PRT) en la mesa redonda sobre la vigencia del pensamiento de León Trotsky celebrada el 20 de agosto de 2016 en la sede del PRT con motivo de la Jornada Conmemorativa de los 40 años del PRT. En la mesa redonda también participaron Edgard Sánchez (PRT) y Manuel Aguilar Mora (LUS).

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jueves, 22 de diciembre de 2016

ULTIMA SESION DE BRUJULA METROPOLITANA CONVIVENCIA Y PASTORELA

MIER 21DIc18HRS, ULTIMA SESION DE BRUJULA: CONVIVENCIA: CON MUSICA, PASTORELA Y MÁS! LLEVEMOS ALGO PARA COMPARTIR

¡Se acaba el año! y para cerrar con broche de oro, invitamos a toda la comunidad de
Brujula Metropolitana
a la última reunión del 2016: 


Vamos a desearnos parabienes para el 2017 y a celebrar la vida y nuestros logros, un año más de amistad y reflexíón.


Tendremos una reunión festiva y contaremos con la participación de queridos compañeros de Brújula: León Gerardo Ayala Orozco
con su TRIO HUAPANGUERO, DECIMERO Y FESTIVO

Una pequeña pastorela:
"EL NIÑO JESÚS EN TIEMPOS DE AFORES", representada también por algunos compañeros de Brujula.

Y para COMPARTIR Y CONVIVIR, 
todos llevemos algo para comer y beber .
Los esperamos!

MIERCOLES 21 DE DICIEMBRE; 18HRS

Ojo: EMPEZAREMOS A LAS 18HRS, PARA TENER MÁS TIEMPO PACHANGUERO!

Cita en: Álvaro Obregón 182, Centro Cultural Artesanal, PPS. Entre Tonalá y Monterrey,Col.  Roma,  parador METROBUS: Alvaro Obregón, o Metro Insurgentes saliendo por Jalapa INFORMES: kakumei2006@gmail. com, 5552756418
NO TE PIERDAS LAS ÚLTIMAS CONFERENCIAS DE BRUJULA  ESTUVIERON GENIALES POR SI NO PUDISTE IR
PUEDES VER LOS VIDEOS  AQUI


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DECLARACIÓN DE LOS HOMBRES Y MUJERES DE LA MIEL Y DEL MAÍZ.

Reenviamos importante declaración ( punto 2 y 3 se refieren al impacto de plaguicidas)
DECLARACIÓN DE LOS HOMBRES Y MUJERES DE LA MIEL Y DEL MAÍZ.

Mérida, Yucatán 13 de septiembre del 2016
 
Los apicultores y apicultoras mayas, reunidos en Mérida, Yucatán, para analizar nuestros problemas, los días 12 y 13 de septiembre del 2016, damos a conocer la siguiente declaración:  
Hemos visto lo que está pasando en algunos lugares de nuestro territorio y en otras zonas apícolas del mundo, donde otras actividades productivas, como la agricultura industrial y la ganadería, están destruyendo las selvas y contaminando el agua de la que vivimos, y contamina su miel, afectando su precio. Por lo tanto, como productores, nos urge: 
·        Comercializar directamente, pero teniendo un mayor precio por la conservación que hacemos de nuestra selva, nuestra cultura, y por ofrecer un producto de calidad y pureza insuperable, casi único en el mundo: la miel de la Península de Yucatán. Pedimos a nuestros gobiernos que nos apoyen, no solo a uno de nosotros, sino a todo el gremio apícola, a posicionar mejor nuestros productos en todo el mundo. 
·        También pedimos a las autoridades agrícolas federales y estatales apoyar las estrategias de manejo de plagas y enfermedades, así como de alimentación natural de nuestras colonias, que estamos impulsando las empresas y cooperativas apícolas mayas en la Península de Yucatán, en lugar de ofrecer solamente medicamentos alimentos químicos promovidos por las empresas farmacéuticas que contaminan nuestra miel y a la larga, bajarían el precio de nuestro producto.
Por otro lado, para tener una actividad económica exitosa para nuestras familias y para la economía de nuestros estados, necesitamos garantías y apoyos básicos. Merecemos esto como productores esforzados y respetuosos de la Ley, pero también es nuestro derecho como antiguos y legítimos pobladores de la Península de Yucatán, donde vivimos desde mucho antes que llegaran otras naciones y que nacieran México como país y Yucatán, Campeche y Quintana Roo como estados. Por lo tanto, exigimos:
1.       Que los gobiernos municipales, estatales y federal vigilen y detengan a tiempo la deforestación de las selvas que sirven de alimento a nuestras abejas, pero que también equilibran nuestras comunidades y permiten nuestras vidas. Como apicultores y protectores de nuestras selvas, hemos hecho ya denuncias que deben ser atendidas urgentemente.
2.       A las autoridades ambientales y a la CONAGUA, que tomen las medidas necesarias para detener la contaminación del agua subterránea con el uso excesivo de plaguicidas (incluyendo herbicidas, fungicidas, insecticidas, entre otros), a través de pozos de absorción que se han abierto en muchas partes de la Península de Yucatán del 2014 a la fecha, sin permisos legales. 
3.       A las autoridades agrícolas y de salud, vigilar de cerca y detener el uso indiscriminado de plaguicidas que envenenan a nuestras abejas y a nosotros. Una actividad económica no debe afectar, y muchos menos acabar con otra. 
4.       A autoridades agrarias y ambientales, detener la presión para dividir, rentar ó comprar la tierra de nuestras comunidades y ejidos. Los apicultores y apicultoras ayudamos a hacer un buen uso de todas las tierras que nos heredaron nuestros abuelos; no solo la usamos para producir miel, sino para hacer milpas para alimentarnos, y otras muchas actividades que mantienen la selva en buen estado. Si dividimos nuestro territorio y nuestras selvas, no sería posible producir la miel que hoy nos sostiene como familias y apoya la economía de los estados.
5.       Todos las apicultores y apicultoras también sembramos milpa de donde sacamos nuestros alimentos, y donde se conservan todas las semillas de maíz, frijol, chile, calabaza, y otros muchos cultivos que servirán a nuestros hijos y nietos por generaciones. Exigimos a las autoridades agrícolas federales y estatales apoyar nuestra actividad milpera, la conservación de nuestras semillas y conocimientos de producción naturales, en lugar de ofrecernos solamente semillas híbridas y paquetes tecnológicos que no nos benefician realmente. 
Basta de considerar a la apicultura como una actividad de tiempo libre y secundaria. La apicultura es nuestra principal actividad económica, nos permite producir otros alimentos y vivir con calidad, genera ingreso de divisas al país y a los estados, conserva nuestra forma de vivir y nuestra cultura y nuestras selvas. Por primera vez desde la llegada de las abejas europeas a la Península de Yucatán, sentimos que están en riesgo la apicultura y nuestras semillas y conocimientos, y con ellos nuestra vida.  
Si el gobierno quiere realmente erradicar el hambre, debe respetar nuestro estilo de vida y nuestras semillas y apoyar la apicultura en la Península de Yucatán.
Suscriben: 
·         Apicultores Lol Cab de Cholul, S.C. de R. L. de C.V.
·         Apicultores Lol Jabin de Tekal de Venegas, SC de RL de CV
·         Productores del área de Protección de Flora y Fauna BALAM K'AX
·         Chilan Kaboob
·         Flor de tajonal
·         Kabi habin, SPR
·         Lol Dzidzilche de Nenelá, SC de RL de CV
·         Lol Jabin de Mayapan, SC de RL de CV
·         Lol Kanchunub de Teabo, SC de RL de CV
·         Lol Soolen-a'ac de Chuchub, S.C. de R. L. de C.V.
·         Productores de MAHAS
·         Pioneros de Cholul (Jóvenes)
·         Productores Chun Jabin, SC de RL de CV
·         Productores de San Agustín
·         Productores Flor Xtabentun, S.C. de R.L. de C.V.
·         Productores Kaabi Uh Lool Xthobil, SC de RL de CV
·         Productores Lool Cha-kaa, SC de RL de CV
·         Tumben Caab, SC de RL de CV
·         TUMBEN LLAJ CAB
·         U Lool Che
·         Uh zihil kabo'ob
·         Xjon-ha'ac de Sudzal, SC de RL de CV
·         Colectivo Apícola de los Chenes
·         EDUCE AC
·         BIOASESORES
·         EDUCE Coop
·         Ma OGM Colectivo Sin Transgénicos
·         Misioneros A. C.
·         CERTIMEX
·         Carlos Cantun
·         Josue Benjamin Chan Yeh
·         Manuel Nah 
·         Mariano Sánchez Luna 
 

Con el apoyo técnico y/o auspiciamiento de: 
ECOSUR
UADY-UPS
CONANP
GIZ
Programa de Apoyo a la Reducción de Riesgos de Desastres, PMR
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